Hoy os presentamos nuestra exquisita receta de fideuá de pollo, un plato clásico que fusiona los mejores sabores mediterráneos gracias a la combinación de fideos dorados, tiernas blanquetas de pollo y una variedad de ingredientes cuidadosamente seleccionados.
Con un tiempo de preparación de aproximadamente 1 hora, podrás sorprender a tus invitados con una receta que transporta el espíritu de la costa a tu mesa.
Desde el salteado de los fideos hasta la jugosidad del pollo y la combinación de sabores en cada capa de sabor, la fideuá de pollo es la elección ideal para tus encuentros en verano.
¡No olvides añadir el toque final para realzar aún más sus aromas: el alioli casero!
Elaboración
- Cortar la cebolla y los ajos en dados pequeños (brunoise) y rallar los tomates. Reservar.
- Calentar un poco de aceite en una sartén y saltear los fideos a fuego medio hasta dorarlos homogéneamente. Reservar.
- Calentar un poco de aceite en una paellera y dorar las blanquetas de pollo con una pizca de pimentón a fuego medio. Salpimentar y retirar.
- En la misma paellera, pochar la cebolla con un ajo y medio a fuego medio. Salpimentar.
- Desglasar con la salsa de soja y el vino tinto. Subir el fuego para que se evapore el alcohol.
- Incorporar los tomates rallados, el concentrado de tomate y una pizca de romero y pimentón ahumado. Cocinar durante 20 minutos a fuego medio-bajo.
- Añadir el pollo, los fideos y el caldo de pollo caliente. Mezclar.
- Llevar al horno durante 20-25 minutos a 200ºC y gratinar un par de minutos a máxima temperatura.
- Triturar el huevo con el medio ajo restante, 100 ml de aceite, un chorrito de zumo de limón y una pizca de sal. Procesar hasta obtener una salsa homogénea (allioli).
- Para emplatar, servir la fideuá de pollo en un plato y acompañar con un poco de allioli.